Espirales de chorizo canario

Los chorizos que se elaboran en Canarias se caracterizan por su pasta blanda, fácil de untar. Hace unas cuentas decadas, casí cada familia dedicada a la agricultura en las islas tenía por costumbre criar un cochino, o dos, que se sacrificaba a mediados de noviembre cuando se terminaba la fruta con la que lo alimentaban. La matanza era toda una celebración y la carne se salaba y guardaba para el invierno: pero en algunos casos se hacía este chorizo, moliendo las partes más gustosas del cerdo como los cachetes, pancetas y paletillas, prescindiendo de las carnes más limpias que dejaría el embutido muy seco. Se le añadía ajo molido, sal, pimentón, algunas especias, vino y se amasaba todo junto, tras unos días de fermentación se embutía en la tripa del mismo animal que había que limpiar muy bien.
En la actualidad, aún existen varias carnicerías en las islas que siguen preparando el chorizo como antaño, estas carnicerías se han concentrado sobre todo en el pueblo de Teror, de ahí que a este chorizo se le conozca popularmente como chorizo de Teror
Dada su textura untuosa, este chorizo se suele utilizar para untar sobre tostadas y sobre todo para comerlo en bocadillo, untando el interior del pan con la pasta. Hoy te propongo otra opción genial y que sorprende.

Grado de dificultad: Bajo
Tiempo de preparación: 40 minutos + 2 horas
Cantidad: 30 espirales

Ingredientes:

Para la masa:

• 300 g. de harina de fuerza
• 150 g. de agua
• 18 g. de levadura fresca
• 1 cucharada de aceite
• 1 cucharadita de sal
• Una pizca de azúcar

Para el relleno:

• 100 g. de chorizo de Teror
• 50 g. de queso semicurado
• Una pizca de orégano

Elaboración:

Calentamos el agua hasta que esté tibia y entonces le añadimos la levadura, el aceite y el azúcar, removemos para que la levadura se deshaga y se mezcle todo bien.

Por otro lado, tamizamos la harina y le añadimos la sal, y mezclamos. Es muy importante que la sal no entre en contacto directo con la levadura pues anulará su efecto. Ahora le añadimos el agua con la levadura que habíamos preparado antes y amasamos. Tenemos que amasar hasta que la masa esté completamente homogeneizada. Cuando hayamos terminado de amasar, ponemos la masa en un bol y la dejamos fermentar hasta que doble su tamaño, dependerá de la temperatura ambiente pero si no hace mucho frío aproximadamente tardará 1 hora.

Una vez la masa ha fermentado la estiramos con el rodillo de modo que nos quede un rectángulo de unos 40x25cm., la masa debe tener un grosor de aproximadamente 5mm., sobre ella extendemos el chorizo de Teror y luego enrollamos la masa por el lado más largo, de modo que nos quede hecho un rollito. Con un cuchillo de sierra vamos cortando porciones del rollito de 1cm. de grosor y las vamos poniendo sobre papel de horno, las dejamos reposar en un lugar calido 1 hora. 

Pasado este tiempo, les ponemos por encima el queso rallado y una pizca de orégano y horneamos con el horno precalentado a 200ºC por arriba y por abajo durante 15 minutos. Dejamos entibiar sobre una rejilla y listas para comer.

Fuente de la receta: propia