14.2.13

Felicidades, enamorados del mundo!! Petit choux relleno de nata


Cuenta la leyenda, que el emperador romano Claudio II prohibió los matrimonios entre las parejas jóvenes porque afirmaba que los soldados solteros eran mejores; sin embargo el sacerdote Valentino, no acató la orden y siguió celebrando bodas. Debido a esto y otros motivos religiosos Valentino fue mandado a matar el 14 de febrero del 270, pasando, varios años después, a convertirse en el patrón de los enamorados. Y aunque son muchos los años que han pasado y nuestra vida ya no se parece en nada a la de aquella época, sorprende reconocer que el amor siempre ha estado presentes en todas las personas sin importar en que siglo hayan vivido.

En mayor o menor medida todos hemos sentido alguna vez algo parecido al amor... las cosquillitas en el estómago, largas horas flotando en una nube o esa sonrisita perenne en la cara.... El amor nos hace sentir vivos y nos da una razón para seguir adelante cuanto todo lo demás falla... nos hace sentirnos guapos, jóvenes y mejores personas... si nos paramos a pensarlo, nos daremos cuenta de que las horas más felices de nuestra vida las hemos pasado con esa personita especial. Se puede celebrar San Valentín como cualquier otra fiesta en la que el espíritu comercial impone sus normas pero este día sobre todo se celebra (y se demuestra) que lo más importante no se compra con dinero... ¡¡quien pasa el día de San Valentín con su amor no podría ponerle precio a toda esa felicidad!!


Grado de dificultad: Bajo
Tiempo de preparación: 1 hora y 30 minutos
Cantidad: 6-7 corazones

Ingredientes:
Para la masa choux:
  • 75 g. de harina
  • 65 ml. de leche
  • 50 ml. de agua
  • 45 g. de mantequilla sin sal
  • 50 g. de azúcar
  • 2 huevos grandes
  • Unas gotitas de colorante rojo
Para el relleno:
  • 100 ml. de nata para montar
  • 40 g. de azúcar


Elaboración:
En una olla ponemos la leche, el agua, el azúcar, la mantequilla en trocitos y el colorante rojo, y calentamos a fuego medio hasta que la mantequilla se haya derretido y esté todo bien mezclado, entonces subimos el fuego y cuando la mezcla empiece a hervir le añadimos la harina de golpe. Removemos con una cuchara hasta de madera hasta que la masa se despegue de la olla, entonces la apartamos del fuego. La seguimos removiendo un poco más hasta que se quede hecha una bola y la volvemos a poner al fuego un minuto sin parar de mover para que pierda un poco de humedad.


Dejamos reposar la masa 10 minutos para que se enfríe un poco antes de añadirle los huevos. Pasado este tiempo añadimos un huevo y removemos hasta integrarlo completamente, hacemos esto con todos los huevos. Habrá momentos en los que parezca que la masa se ha estropeado pero solo será cuestión de seguir removiendo para que se arregle.
Después de integrar los huevos nos tiene que quedar una masa muy cremosa, la metemos en una manga pastelera con una boquilla rizada y, sobre papel de hornear, vamos haciendo corazones de unos 10-12cm. dejando una separación entre ellos porque crecen un poco. Metemos al horno precalentado a 190ºC durante 30 minutos, hasta que los veamos dorados y crujientes. Una vez sacados del horno los dejamos enfriar sobre una rejilla.
Mientras se enfrían los corazones montamos la nata con el azúcar, y cuando se hayan enfriado los abrimos por el medio y los rellenamos con la nata.


Fuente de la receta: propia

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Una maravilla de corazones, preciosos. eres una artista. Un beso.

Sandra Delgado dijo...

Ooooh Me ha encantado!!! Sencillo, ligero y muy original :D Ideal para el día de hoy!!!
Un beso!